Encabeza Peña Nieto el CXXXVII Aniversario Luctuoso de Benito Juárez García.

Toluca, Estado de México
Sábado 18 de julio de 2009.

Al tiempo de señalar que la democracia no se agota en las elecciones, se funda en el voto, y exige libertad, legalidad y responsabilidad, pero sobre todo cumplirle a la sociedad, Efrén Rojas Dávila, secretario de Desarrollo Social, destacó que la democracia es un reclamo de la sociedad, que espera de sus gobiernos compromisos claros, no promesas fáciles o descalificaciones.

Durante el CXXXVII Aniversario Luctuoso de Benito Juárez García, evento que encabezó el gobernador Enrique Peña Nieto, expresó que el compromiso del mandatario estatal con la democracia se ha demostrado en la aplicación de una política social que combate a la pobreza, desarrolla capacidades, genera estabilidad, paz seguridad y cohesión social. Asimismo, precisó, en el Estado de México se gobierna para todos, con una visión incluyente, de acuerdos, plural y, sobre todo, para beneficio de la población; por ello, “los mexiquenses seguiremos impulsando el progreso con base en las libertades individuales, los derechos que consagra la Carta Magna y las conquistas sociales que hasta ahora hemos logrado”.

Ante Heriberto Ortega Ramírez y José Castillo Ambriz, representantes de los poderes Legislativo y Judicial, respectivamente, dijo que en este momento crucial de la historia mexicana se debe recordar la herencia ética e ideológica del patricio: “el respeto a las libertades pública, es la base para construir un Estado fundado en la democracia, el gobierno representativo y, sobre todo, el cumplimiento a la voluntad popular” y aseveró que “si la democracia es el destino de la humanidad, la libertad es su brazo indestructible”. Agregó que el reciente proceso electoral fue la expresión de una sociedad interesada en transformar su presente y su futuro por las vías institucionales y pacíficas que la propia Constitución le otorga, y añadió que cuando las diferentes fuerzas políticas y la sociedad debaten intensamente sobre los caminos para la transformación democrática, la respuesta nuevamente vuelve a ser el apego a la norma.

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Durante el evento, en el que el titular del Ejecutivo mexiquense depositó una ofrenda floral y montó una guardia de honor en el Hemiciclo a Juárez, Rojas Dávila mencionó que “los mexiquenses realizamos comicios ejemplares para la nación porque apelamos al valor esencial de la democracia: el respeto a la legalidad”. Ante los retos, diferencias y controversias, es la ley”, subrayó.

En presencia de Lucino Carlos Piedra Lezama, comandante de la XXII Zona Militar, y Eduardo Gasca Pliego, rector de la Universidad Autónoma del Estado de México, así como de los integrantes del gabinete legal y ampliado, el funcionario estatal dijo que se seguirá exigiendo el pleno respeto a la soberanía de los estados, a la autonomía municipal, en un ejercicio de coordinación efectiva de los tres órdenes de gobierno, que dé nueva respuesta a las nuevas condiciones, entre otras, a la visión metropolitana y a un panorama de enormes retos en materia de empleo, seguridad, y servicios básicos. Por ello, la respuesta del estado tendrá que basarse en el diálogo, en el acuerdo de las fuerzas políticas en pos de un objetivo común y para lograrlo se tienen que superar las emociones que las elecciones hayan dejado para emprender, con voluntad y serenidad, las soluciones que hoy demanda la sociedad, concluyó.

Por su parte, Luis Eduardo Granados García, alumno del octavo semestre de la Licenciatura en Educación Física de la Escuela Normal No. 1 de Toluca, dijo que no se puede ni se debe olvidar que la gran lección del Benemérito de las Américas fue que la ley es el mejor camino para preservar la unidad y conducir la transformación de la sociedad. Dijo que por sus luchas y logros como político que alcanza la estatura de estadista, es modelo para gobernantes que buscan el estricto cumplimiento de su deber y a los miembros de la generación de la Reforma les correspondió protagonizar una etapa decisiva en la construcción del México moderno, ya que es una etapa en la que se consolida la identidad de la nación y toma forma el Estado mexicano , basado en leyes e instituciones republicanas, y cimentado en la convicción política de que los cambios duraderos son los que se realizaron por la vía del derecho.

Indicó que en lo político se consagró la voluntad popular como base de la organización del Estado, la separación de la iglesia y el Estado, garantizó la libertad de cultos y restableció la supremacía del poder civil; en lo económico, la desamortización de los bienes del clero, liberó la tierra y la puso en circulación; y en el ámbito social, se impulsó la educación popular, gratuita y laica. “Juárez, concibió la educación como parte del quehacer político más profundo y de más largo alcance”.

“Hoy al evocar la memoria, renovamos la esperanza en nuestro futuro; sabemos, siempre lo sabremos que ya otros mexicanos, desde la adversidad y con plena determinación, pudieron construir una opción de mayor justicia y libertad para las generaciones que lo sucedieron”, finalizó.