México, Distrito Federal
Miércoles 10 de Junio de 2009.
Guille Franco, delantero del Villarreal, y Óscar Rojas dieron la victoria a la selección dirigida por Javier Aguirre, mientras que Hyden Tinto convirtió el tanto del conjunto trinitense en el Estadio Azteca en partido de la quinta jornada del hexagonal final de las eliminatorias de la Concacaf. La serie, que dará tres billetes directos a Sudáfrica 2010, es liderada por Costa Rica con 12 puntos, seguida por Estados Unidos con dos menos y Honduras, con uno más que los mexicanos.
El público que llenó el Azteca reprochó con abucheos a los mexicanos su falta de contundencia ante el marco rival, aunque el equipo obtuvo una victoria que le urgía para volverse a meter a la ‘zona de repesca’.
Primer gol trinitense en México
El panorama se veía festivo para México con el gol de Franco al primer minuto del partido, pero acabó con nubarrones porque un error defensivo le abrió la puerta al gol caribeño, el primero que este país le anota a su rival del miércoles como visitante en la historia.
La necesidad y la urgencia de victoria del equipo dirigido por Aguirre se tornó en incapacidad y problemas para anotar porque, a pesar de que el equipo local tocó bien la pelota y generó opciones de marcar, la desesperación hizo dilapidar varias opciones claras.
El ‘Guille’ Franco anotó el primero, pero falló por lo menos tres oportunidades más de marcar, al igual que Carlos Salcido y Cuauhtémoc Blanco, del Chicago Fire estadounidense, quien dejó en las manos del portero un remate de cabeza en el que tenía toda la portería a su disposición.
Rojas enmendó los muchos errores cara a gol
Los trinitenses apenas llegaron un par de veces aunque con mucha peligrosidad: la primera opción se dio después de que el portero Óscar ‘Conejo’ Pérez soltara la pelota y la segunda fue el gol de Tinto, tras una infantil equivocación de Andrés Guardado y una marca deficiente de Salcido.
México se fue al vestuario con la cabeza gacha y pensando cómo arreglar un partido que de nuevo se le estaba saliendo de la manos. Sin embargo, fue Óscar Rojas tras el descanso quien enderezó el rumbo con un gol en un disparo de casi 30 metros de distancia que llevó calma al banco mexicano.
Trinidad y Tobago, selección dirigida por Russell Latapy, retrocedió y colocó una doble línea defensiva para evitar un nuevo gol en contra y con el deseo de que otro error mexicano le permitiera sacar un resultado favorable que nunca se dio.