John McCain visitó la Ciudad de México.

México, Distrito Federal
Jueves 3 de Julio de 2008.

Este jueves por la mañana, el rector de la Basílica de Guadalupe, Monseñor. Diego Monroy Ponce, recibió al candidato del partido republicano de los Estados Unidos, John McCain, quien arribó al santuario guadalupano en compañía de su esposa, Cindy Hersley, el embajador de los Estados Unidos en México, Tony Garza, y los senadores Lindsey Graham (republicano) y Joseph Lieberman (independiente).

Durante la visita, Diego Monroy Ponce, dio a conocer y explicó ampliamente al senador, el acontecimiento Guadalupano y la actualidad del mensaje universal que contiene, de solidaridad e integración, más allá de partidos, ideologías y razas. Frente a la imagen de Santa María de Guadalupe, el senador y su esposa depositaron un ramo de rosas blancas, y recibieron la bendición. Más adelante, el senador McCain dejó su rúbrica en el libro de visitantes distinguidos con estas palabras: “Con aprecio por esta conmovedora e inesperada experiencia. Gracias por todo lo que haces por la paz del mundo”. También firmó su esposa y los senadores.

El rector del santuario obsequió al senador McCain y a su comitiva, una imagen de la Virgen de Guadalupe y un libro con la historia de San Juan Diego en edición especial. La esposa del senador recibió una medalla de plata de la virgen de Guadalupe. Posteriormente, los visitantes se trasladaron a la Capilla abierta, donde el Rector de la Basílica les explicó algunos aspectos destacados de la activa vida del santuario y los templos ubicados en el Tepeyac; conocieron el enorme atrio mariano y las joyas arquitectónicas aquí ubicadas, en particular la Basilica antigua, a la que hicieron una breve visita.

Posteriormente, se trasladó a la residencia oficial de Los Pinos a bordo de un convoy que incluyó 14 camionetas y cuatro patrullas de la Policía Federal Preventiva (PFP). En el equipo de protección del político estadounidense participan elementos del Estado Mayor Presidencial (EMP) y un equipo de seguridad del Servicio Secreto de Estados Unidos, que porta armas largas que ostentan por encima de las ventanillas a la vista de todos. Alrededor de las 10:30 de la mañana, una camioneta blindada tipo Suburban blanca, en la que McCain viajaba de copiloto, ingresó a la casa presidencial, en donde sostuvo una reunión con Felipe Calderón. Junto con McCain llegó a Los Pinos el embajador de Estados Unidos en México, Antonio O. Garza.

La reunión entre el presidente Felipe Calderón y John McCain se prolongó por casi 45 minutos, donde el Primer Mandatario comentó que México confía en que Estados Unidos valore la prioridad que representa el trabajo bilateral en materia de migración, comercio, desarrollo, competitividad regional y seguridad como medios para impulsar el bienestar de ambas sociedades. El Presidente Calderón reiteró la voluntad de su gobierno por continuar colaborando en todos los temas de interés común, entre ellos la prevención y respuesta a desastres naturales y pandemias, la inocuidad alimentaria y la protección del medio ambiente. Intercambiaron puntos de vista acerca de temas relevantes de la agenda regional y global. En este sentido, el Presidente Calderón subrayó la importancia de mantener una estrecha relación entre América Latina y Estados Unidos.

Por su parte, el Senador McCain destacó la importancia de la asociación entre México y Estados Unidos para impulsar la prosperidad y la seguridad de todas las comunidades en Norteamérica. Estableció que una de sus prioridades siempre ha sido fortalecer una relación más cercana con México. Subrayó asimismo la larga historia compartida entre ambos países y la importancia de las enormes contribuciones que realizan los mexicanos en Estados Unidos en los ámbitos económico, cultural y social.

El Senador McCain reconoció el liderazgo que el Presidente Calderón ha mantenido desde el inició de su administración en la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico y expresó su apoyo a la cooperación estadounidense, incluyendo esfuerzos como la Iniciativa Mérida, para atender estos desafíos. El Presidente Felipe Calderón señaló que el próximo Presidente de Estados Unidos, independientemente de quien resulte electo, contará con la cooperación de México para el desarrollo de una región más próspera y competitiva, así como para el fortalecimiento de la democracia y los derechos humanos.

[img align=left]http://www.zumpangolandia.com/uploads/img486dbaa148ee3.jpg[/img]El Senador reiteró su apoyo a la relación comercial bilateral, generada por el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, y a los esfuerzos que ambos países realizan por atender los temas de seguridad que afectan la frontera común y a favor del desarrollo y modernización de infraestructura en esa zona. Durante el encuentro, el Titular del Ejecutivo Federal señaló que el Gobierno de México es respetuoso de las decisiones del pueblo estadounidense y de sus procesos internos. Aseveró que por ello se mantendrá atento al desarrollo del proceso electoral en Estados Unidos, así como a las propuestas y acciones de cada uno de los candidatos a la Presidencia de ese país.

Finalmente, el Presidente de México y el Senador McCain dialogaron sobre diversos aspectos de la agenda regional americana y sobre temas globales de interés mutuo.

Al medio día, visitó el Centro de Mando de la Policía Federal Preventiva (PFP), donde McCain reafirmó el apoyo de Washington a la lucha contra el narcotráfico en esta nación latinoamericana. En este centro policial, desde donde la PFP coordina sus labores operativas en todo el país, el aspirante republicano reconoció, en una rueda de prensa, que EE.UU. debe hacer más por aumentar el control al tráfico de armas hacia territorio mexicano.

Asimismo, propuso que su país ponga en marcha un programa de trabajo temporal con América Latina. “En el corto plazo Estados Unidos, México y otros países del hemisferio necesitan un programa de trabajo temporal, pero que sea verificable con documentos biométricos probados con cuidado, y que no puedan ser falsificados”, señaló McCain.

El senador por Arizona, quien estaba acompañado de su esposa, Cindy, y de los senadores republicanos por Connecticut y Carolina del Sur, Joe Lieberman y Lindsey Graham, respectivamente, señaló que ese programa “debe ser parte de una reforma migratoria integral”. “O de lo contrario seguiremos teniendo un flujo de migración continuo de gente viniendo a Estados Unidos ilegalmente”, añadió.

A juicio del legislador, su país cuenta con la capacidad tecnológica para que esos documentos biométricos con los que se identificarían los trabajadores temporales, “estén asociados a un sistema electrónico de verificación de empleo”. “Cuando se sepa que la gente que viene ilegalmente no obtendrá un trabajo en Estados Unidos, eso cortará el imán que atrae a las personas al país y reducirá dramáticamente el peso de la inmigración ilegal en todos los países del hemisferio”, manifestó.

McCain aseguró, como lo ha hecho ya en varias ocasiones durante su campaña, que primero es necesario reforzar la seguridad en la frontera con México, antes de discutir una reforma que atienda la inmigración de latinoamericanos a EE.UU., donde se calcula viven 12 millones de indocumentados, la mitad de ellos mexicanos. “Debemos asegurar nuestra fronteras y después atenderemos el problema de la reforma migratoria integral (…) nuestros ciudadanos quieren que las fronteras sean seguras primero”, afirmó.

En este sentido, el senador consideró que Estados Unidos y México deben aumentar la seguridad en la línea fronteriza, lo que, a su juicio, “requerirá algunos muros, barreras virtuales y equipos de alta tecnología”. De otra parte, el político republicano celebró la aprobación de la Iniciativa Mérida, un plan de apoyo estadounidense contra el narcotráfico en México, que le permitirá al país disfrutar de unos 400 millones de dólares para comprar equipos y capacitar agentes durante su primer año en vigor.

La iniciativa “puede ser más importante que ningún otro acuerdo que hayamos suscrito (México y EE.UU.)”, sostuvo McCain. Ese programa permitirá que “por primera vez veamos cooperación significativa y esfuerzos entre nuestros dos países para frenar el flujo de drogas y romper las estructuras de los carteles de la droga”, señaló.

No obstante, reconoció que su país debe hacer más para evitar que cientos de miles de armas pasen de Estados Unidos a México cada año. “Necesitamos hacer un mejor trabajo para prevenir que ciertos individuos utilicen la identificación de otras personas y compren estas armas, y a través de revisiones de antecedentes y otros mecanismos podremos endurecer considerablemente las normas y reducir o eliminar este problema”, subrayó.

McCain, que concluyó una visita de un día a la capital mexicana, se reunió también con asociaciones de empresarios de EE.UU. y México.